19 de septiembre de 2009

PENA DE MUERTE EN MÉXICO


Asesinato en Metro Balderas, Ciudad de México

18 de septiembre 2009

Se puede ver claramente como el Sr. Cervantes Barreda lucha contra ese cobarde, lo persigue y nadie lo ayuda hasta que el hijo de p... lo mata. ¿La pena de muerte es la alternativa para terminar con este tipo de personas?, ¿para qué queremos a un tipo así entre nosotros o en la cárcel? es mejor si estuviera muerto. 


Por ahora, ya murieron dos personas inocentes, y si matar a una persona que no vale la pena va a salvar a personas que si lo valen, estoy a favor de la pena de muerte.

¿Morirán personas inocentes si se aplica la pena de muerte?

¡Si! y es triste..., pero de todas formas ya mueren muchas personas inocentes y no vamos caminando hacia una solución. Como se menciona al comienzo del blog, el camino es oscuro y la solución es a largo plazo. En este caso y en muchos otros, las decisiones deben ser frías, no hay lugar para sentimientos ni consideraciones.

¿qué traerá la pena de muerte?

Polémica, miedo, descontrol, injusticia… ¡muerte!; suficiente para despertar a una población tan pasiva como la mexicana y motivarla a formar parte activa en las decisiones y acciones de los tres poderes. Puede parecer algo extremista, pero la injusticia, el abuso, la falta de oportunidades y la miseria, no son suficientes para abrir los ojos de tan ciegos mexicanos.

En un país SIN LEY, NI OPORTUNIDADES, es el pueblo quien debe exigir lo suyo. “El pueblo tiene el gobierno que se merece”.

La pena de muerte no es un juego, es algo que se debe manejar de forma precisa, para evitar que maten personas inocentes. Dicen que México no está preparado para manejar algo tan delicado como la pena de muerte, pero tampoco lo está para extraer su propio petróleo ni para aprovechar uno de los territorios mas ricos del mundo, entonces ¿para que está preparado?.

Las situaciones extremas obligan a las personas a reaccionar y luchar por lo que quieren. Es tiempo de exigir lo nuestro. No vamos a dejar que maten a personas inocentes, ni que se aprovechen de la gente.


En muchos casos, como el del metro balderas o de secuestradores, hay evidencia suficiente que demuestra su culpabilidad… ¡MATENLOS! 

Muchas personas que no están a favor de la pena de muerte cambian de opinión cuando viven una mala experiencia, en la que sufren porque le hacen daño a algún ser querido.



Como persona, no quiero matar a nadie, pero si alguien pone en peligro a las personas que amo, si mataría por salvarlas...

3 comentarios:

Ruoppolo dijo...

Tradicionalmente la pena de muerte es asociada con un perfil idelógicamente geométrico en la política. El librito nos dice que negarse es a izquierda, como apoyarla es a la derecha -los diversos matices varían y afinan la posición al respecto-. Más allá de ello, y con la firme intención de desideologizar el debate, me parece que desear dar muerte a quien nos produce repudio, es un instinto natural...pero alguien debe amortiguar el impacto de indignación deseable de tan desagradables imágenes. Desencadenar al asesino ante los leones en el coliseo no genera mayor orden social, al contrario. Un problema parece presentarse cuando el amortiguador por excelencia, el Estado, parece y aparece tan minúsculo, desacreditado, desconfiable, ineficaz y vulnerable. Con todo, el caso del asesinato en el metro Balderas, si gozó de una eficaz participación de las autoridades de la Ciudad de México, brazos del Estado. A pesar de todo, sigue vive la indignación que parece ser, en la penumbra del caso, la única luz. Por ese sentimiento, felicidades Toño.

Toño Busqueta dijo...

En mi entender, el perfil político en México no es geométrico, e ignorando el librito, sin elegir en forma necia bandos de izquierda o derecha eliminando las variables fundamentales, tratando de tener una uniformidad ideológica innecesaria que bloquea buenas alternativas de desarrollo; analizarlo no como un castigo, sino como una respuesta a quien realmente perdió el respeto a la vida, dignidad e integridad de las personas.
Tratamos pero solamente somos empáticos cuando la indignación no es por imágenes, sino por una conexión directa con la persona afectada y más que un espectáculo de coliseo, es la aplicación real de la ley, por lo que es vital fortalecer el sistema de justicia mexicano, para no matar personas inocentes que ya están muriendo por falta de control y de ley. Es mejor morir por una causa que morir en vano, si se quiere mejorar, el camino será difícil y ya es tiempo de tomar decisiones fuertes y de alto impacto en México, que seguir girando en la mediocridad.

Ra dijo...

La pena de muerte provocaría la muerte de personas inocentes por más perfecto que sea el sistema judicial. Es justamente por eso que creo que ningún ser humano debería de ser juzgado con la vida. Estoy de acuerdo que México tiene que cambiar, que su sistema judicial es pésimo...Pero la pena de muerte no la veo como una solución. Es muy diferente la ley oficial a la ley por la que se rigen las personas. Es más bien un problema de ética de la sociedad mexicana que se ve reflejado en el gobierno, enfocado en el beneficio propio. Ahí se cometen las injusticias, y eso sólo se cura con educación.
Sí a encontrar una nueva luz...